Comunicador: Paula Martín Núñez
Autores:
Paula Martín Núñez, Eulogio Benito Martín, Alfredo Manuel Madruga Carpintero, José Antonio Pareja Esteban, Catarina Ines Godinho Soares

Código: a06f647d
Tipo: PÓSTER – Categoría: HOMBRO – Subcategoría: INESTABILIDAD

Introducción
La luxación posterior de hombro representa el 2% de los casos de inestabilidad. Generalmente tiene lugar en el contexto de convulsiones, electrocuciones o traumatismos de alta energía. Se debe tener un alto grado de sospecha ya que con frecuencia pasa desapercibida. Se define como luxación inveterada aquella de tres o más semanas de evolución, requiriendo tratamiento quirúrgico.

Material y Métodos
Describimos el caso de una mujer de 56 años con esquizofrenia paranoide como único antecedente de interés que refiere dolor postraumático de hombro derecho de tres meses de evolución. Atendida en dos ocasiones en el servicio de urgencias donde se descarta patología ósea. Ha realizado tratamiento fisioterápico sin mejoría. En la exploración física se evidencia limitación de la abducción, flexión anterior y rotación externa. Se solicita resonancia magnética diagnosticándose de luxación posterior de hombro con lesión de Hill-Sachs invertida mayor del 40%.

Resultados
Mediante un abordaje deltopectoral se reduce la cabeza humeral y se observa una lesión de Hill Sachs con forma de pera invertida de 4 x 2 x 1,7 cm. Se repara el defecto mediante aloinjerto de cabeza femoral y se fija mediante 3 tornillos. Se confirma la ausencia de lesión glenoidea. Finalmente se comprueba la estabilidad glenohumeral. Se inmoviliza el hombro mediante cabestrillo en rotación neutra durante un mes. Los ejercicios pasivos se inician a las tres semanas y los activos a las cinco semanas con buena evolución. A los seis meses presenta discreta limitación para los últimos grados de abducción y rotación externa, siendo el resto de la movilidad completa. Presenta una total reincorporación a su actividad diaria.

Conclusión
Un 49% de las luxaciones posteriores de hombro presentan lesiones asociadas. La más frecuente es la lesión de Hill Sachs invertida, producida por la impactación de la cara anterior de la cabeza humeral en la glena posterior. Aquellas lesiones superiores al 20% suelen asociar inestabilidad recurrente requiriendo tratamiento quirúrgico. Se han descrito distintas técnicas. Dados los antecedentes de la paciente y su situación basal previa, se optó por la reconstrucción del defecto mediante aloinjerto óseo con un resultado satisfactorio tanto clínica como radiológicamente. En pacientes ancianos o en caso de no poder reestablecer la esfericidad de la cabeza humeral o no conseguir la estabilidad deseada, deberá recurrirse a la artroplastia.