Comunicación: Póster | Tema: Hombro | Categoría: Fracturas

Autor: José Manuel Pérez Alba
Coautores:  Marta Agulo Quilez; Luis Domingo Sánchez Navas; José Luis Bataller Alborch; José Fernando Martínez López

Introducción
Las fracturas de la extremidad proximal del húmero (EPH) suponen el 10% de todas las fracturas, y una incidencia de 31-103/100000habitantes/año. Son frecuentes en pacientes ancianos, siendo la tercera tras cadera y radio distal. Clásicamente el 80% podrían ser tratadas ortopédicamente con unos resultados aceptables. Sin embargo un 20% de las mismas precisarían cirugía. Las indicaciones y la elección de la técnica quirúrgica dependen de las características del paciente, del tipo de fractura y las preferencias del cirujano. Presentamos los resultados clínico-radiológicos de las fracturas EPH que se han intervenido mediante osteosíntesis en nuestro centro en el período 2008-2010.

Materiales y Métodos
Revisión retrospectiva de pacientes mayores de 18 años intervenidos mediante osteosíntesis en nuestro servicio entre el 01/01/2008 y el 31/12/2010. Revisamos pruebas de imagen, historias clínicas y se ha realizado entrevista personal y exploración física de los pacientes. Clasificación las fracturas según Neer. Test de funcionalidad CONSTANT y DASH, y escala EVA del dolor.

Resultados  
Analizamos un total de 84 pacientes, con una edad media de 64 años. De los cuales entrevistamos al 76,2% y obteniendo un seguimiento medio de 37,76 meses (3 años y 2 meses).
Nos encontramos  con disparidad de tratamientos desde osteosíntesis mediante Agujas Kirschner, Enclavados endomedulares flexibles y rígidos, Placas de bloqueo angular y Osteosíntesis percutánea mediante Tornillos canulados.
Clínicamente evaluamos la movilidad y conseguimos un 71,8% de resultados funcionales excelentes/buenos mediante el test CONSTANT y un 67,1 mediante el DASH.
28,6% de complicaciones al final del seguimiento.

Conclusión
El tratamiento de las fracturas de EPH es un reto para el traumatólogo debido a la dificultad de la reducción, especialmente en osteoporosis. Otra dificultad es la elección de la técnica quirúrgica, por el gran abanico de opciones existente. Actualmente no existe un Gold Standard ni un consenso sobre el tratamiento ideal para cada grupo o subgrupo de fracturas. Así pues, la decisión de tratamiento tomarse según las características del paciente y teniendo en cuenta que el cirujano debe orientarse por la técnica que mejor domine; para así conseguir unos resultados funcionales y de alivio del dolor a largo plazo aceptables.